El Afghan Kush cepa, predominantemente una Indica, tiene sus raíces en las montañas Hindu Kush, cerca de la frontera entre Afganistán y Pakistán. Esta variedad, con una larga historia de cultivo, es conocida por su cogollos masivos y ricos en resina y ha sido una opción tradicional para la producción de hachís, especialmente para elaborar charas y hachís negro afgano.
Destaca por su Alto contenido de resina y efectos profundamente sedantes., Afghan Kush suele presentar un contenido de THC de alrededor 15%. Es muy apreciado por sus efectos calmantes, ya que alivia el estrés, el dolor y la ansiedad, y se sabe que induce sensación de somnolencia, hambre y sensación de vértigo.
En cuanto a cultivo, la Afghan Kush es reconocida por su facilidad de crecimiento y altos rendimientos. La variedad produce cogollos grandes y de punta roma y se adapta tanto a entornos interiores como exteriores, lo que la convierte en una opción versátil para los cultivadores. Esta variedad está ampliamente disponible para su cultivo gracias a White Label Seed Company, un socio de Sensi Seeds de los Países Bajos.
Kush afgano perfil de sabor terroso y sus potentes efectos han mantenido su popularidad entre los entusiastas del cannabis durante generaciones, lo que la convierte en una opción clásica y venerada en la comunidad cannábica.